Siempre he querido hacer algunas recetas inspiradas en la «hora del té» inglés. Me parece muy elegante, distinguido y con una apariencia vintage que es totalmente mi estilo. Estos scones (ok… pancitos) son apenas para hacer una pausa en la tarde y preparar un café o té y leer.
Hice esta «Vintage series» para compartir recetas inspiradas en otras épocas, o que me hagan sentir que viajo en el tiempo al prepararlas o comerlas. Los scones salados son bastante apropiados para comenzar esta serie. Con aromas y sabores contrastantes, son por sí solos, un bocadillo completo.
Consejos
Más que un consejo puede decirse tengo una modificación para esta receta. En lugar de utilizar el corta galletas para separar los scones como yo hice, se puede usar una cuchara para helado grande (o cualquier cuchara grande) y solamente sacar la mezcla directamente el recipiente y colocarla en la bandeja preparada para hornear. La forma que tendrán será más irregular e interesante. A decir verdad, la próxima vez que los haga es posible que utilice esa técnica. Pero si prefieren una forma más elegante, con el corta galletas lo mejor.
La mantequilla debe estar bastante fría. De esta manera, el calor de las manos no la va a derretir rápidamente y quedará con una contextura arenosa. Igualmente, es importante enfriar los scones en una bandeja en el congelador para que la mantequilla se solidifique de nuevo. Así tendrán la textura deseada al salir del horno.
Otro consejo importante es no trabajar la masa demasiado. Una vez que se agrega la mantequilla fría, debe tener la contextura de arena, no debe ser pasta. Está bien si quedan algunos grumos de mantequilla (pero no demasiado grandes).
De lo mejor que tiene esta receta es que no necesita levadura, ni tiempo para crecer y los ingredientes pueden ser modificados a gusto de cada quien. Honestamente lo que hice fue fijarme qué tenía en mi cocina y rápidamente logré obtener una buena combinación. Fácil, rápido y sabroso.
Deliciosa receta de scones de tomates secos, hierbas y parmesano perfectos para la hora de café o té.
Ingredientes
- 4 tazas de harina
- 3/4 taza de queso parmesano
- 2/3 taza de tomates secos picados (tomates conservados en aceite)
- 1/4 taza de albahaca fresca picada
- 1 cucharadita de tomillo fresco picado
- 1 cucharadita de romero fresco picado
- 1 cucharada de ajo picado (aproximadamente 2 ajos)
- 4 cucharaditas de polvo de hornear
- 1 cucharadita de bicarbonato (baking soda)
- 1 1/2 cucharaditas de sal
- 1/2 cucharadita de pimienta
- 170 gramos de mantequilla sin sal (aproximadamente 1.5 barras de mantequilla) en cubos pequeños muy fríos.
- 1 3/4 taza de leche
- 1 1/2 cucharada de limón o vinagre blanco
- Si tienen buttermilk, se utiliza igualmente 1 3/4 tazas.
Para Hacer Buttermilk:
*Para otras opciones de ingredientes, ver las notas.
Preparación
- En un recipiente grande, mezclar la harina, parmesano, los tomates secos, albahaca, romero, tomillo, ajo, polvo de hornear, bicarbonato, sal y pimienta hasta que quede todo incorporado.
- Agregar la mantequilla fría a la mezcla de harina y utilizar las manos para incorporarla hasta lograr una textura arenosa.
- Para hacer buttermilk: en otro recipiente mezclar la leche y el jugo de limón o vinagre blanco. Dejar reposar 5 minutos.
- Agregar el buttermilk a la mezcla de harina y mantequilla. Mezclar hasta que quede homogéneo. So la mezcla se siente demasiado húmeda, se puede poner un poco más de harina, pero hay que tomar en cuenta que debe quedar un poco húmeda.
- Esparcir la mezcla en una superficie plana espolvoreada con bastante harina. Formar un rectángulo de 1.5 pulgadas aproximadamente de grosor.
- Cortar los scones en forma redonda utilizando un corta galletas (uno de 2.5 pulgadas aproximadamente de circunferencia) y colocar los scones en una bandeja para hornear con papel para horno o una base de silicona (**Ver las notas para método alternativo).
- Colocar la bandeja con los scones en el freezer durante 15 minutos.
- Calentar el horno a 200 C.
- Sacar los scones del freezer y colocarlos en el horno precalentado durante 15-18 minutos (o hasta que estén dorados) en la rejilla del medio. Yo suelo darles vuelta a la mitad del tiempo para asegurarme que se doren todos igual.
Notas
* Se pueden utilizar otros ingredientes como queso Cheddar, Manchego o Monterrey. Para las hiervas salvia (en menor cantidad, ya que es fuerte) orégano, eneldo. También aceitunas, chile dulce morrón, entre otros. Hagan la mezcla que más les guste y sabrá delicioso.
**Para sacar las porciones, se puede también utilizar una cuchara grande (o de helado) directamente desde el recipiente y luego colocarlo tal cual en la bandeja para hornear.
Mónica B
Se ven deliciosos, definitivamente los voy a probar hacer en estos días y además súper fáciles!
Karla Solano
Buenísimo Mónica! me cuentas que tal 🙂